19 de septiembre de 2018

¿Tendremos impresión 4D casera en 2019?

La impresión 4D crea materiales que cambian su forma con el tiempo si reciben agua, luz o calor, a partir de objetos creados por una impresora 3D. El Doctor Hosting te muestra algunos ejemplos para que lo entiendas mejor, ya que se comenta que a partir del año que viene puede que se empiecen a comercializar.

Las impresoras 3D lo que hacen es repetir una estructura 2D capa a capa, de abajo arriba, hasta crear un volumen 3D. La impresión 4D realmente es la capacidad de esa cosa impresa en 3D de cambiar de forma en función del tiempo o de las condiciones climáticas. Por tanto, el secreto de la impresión 4D no es la impresora, sino el material con el que se imprime, capaz de ser programado para cambiar de forma al pasar de un ambiente a otro.

Gracias a esta cualidad “autoensamblaje” de la impresión 4D, por el cual partes desordenadas construyen una estructura ordenada según los estímulos externos, se pueden crear puentes que se reparen, ropa que se transforme según la temperatura, sillas que se adapten a nuestra postura, micropartículas que ayuden a sanarnos u objetos más grandes que lo que puede abarcar la impresora, como el de la foto superior que se agranda un 87% tras ser impreso. Ya hay casos reales, como las férulas creadas por la Universidad de Michigan para tres niños de EE.UU que nacieron con anomalías respiratorias. Las férulas se colocaron en la tráquea para facilitar la respiración y se fueron adaptando al crecimiento de los niños, para posteriormente disolverse cuando los órganos se desarrollaran. Esto les permitió llevar una vida normal sin pasar su infancia en la UCI.

Henk Jonkers, profesor de la Universidad Técnica de Delft, lleva años estudiando la creación de “hormigón vivo” que se autorepara y sea indestructible, muy útil para que las grietas de las carreteras se cicatrizaran solas.

Los materiales estimulables no son nuevos, como puedes ver en el vídeo anterior del plástico que se autorepara, o la patente registrada por Samsung para que las pantallas de sus dispositivos se reparen si sufren algún daño (podríamos verlo en el Galaxy S10). Lo novedoso es poder crearlos con una impresora 3D. A continuación tienes otros ejemplos.